Dulces Sueños

No hay nada como llegar a casa satisfecho tras varias horas caminando por el mundo. Y de eso me he dado cuenta hace un rato cuando volvía tranquilamente a mi casa, paseando por el centro de Barcelona. A veces pienso que no es necesario mucho dinero ni poder para tener experiencias tan gratificantes como disfrutar de un paisaje urbano casi desierto, tan solo perturbado por las potentes mangueras de agua que refrescan las aceras o parejas que aprovechan los últimos minutos del día para decirse algunas verdades que sólo se recitan cuando el sol duerme.
Y cuando caminaba, me ha venido la necesidad de alargar la jornada un poco más sentándome unos minutos al ordenador, para poneros al corriente de las novedades sobre las que estamos trabajando. Hoy ha tenido lugar la primera reunión de trabajo de la semana, en la que hemos aprovechado para empezar a disenar el guión técnico. Sobre la base de imágenes que fui improvisando en mi cabeza mientras releía con tranquilidad el guión el pasado lunes, y con la ayuda de dos puntos de vista nuevos, se han ido definiendo planos, movimientos de cámara y demás trucos de la vertiente más técnica de la fábrica de sueños. El resultado se verá dentro de algún tiempo, pero el aroma ya se empieza a sentir, y creedme si os digo que no dista mucho del olor que emana de una cosecha de uva de la mejor calidad. En un principio acabaremos con este proceso a final de esta semana, para poder dedicarnos al story la semana que viene, junto con la planificación y los ensayos. De momento, seguimos en nuestro mundo, aunque no tardaremos a compartirlo con vosotros. Hasta entonces... DULCES SUEÑOS.
Serj.

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